La pornografía y sus consecuencias
Otro tema muy actual es la pornografía y para poder dimensionar el daño que produce, el adulto que desee trabajar en Prevención del A.S.I, deberá cuestionarse primeramente su estilo de vida y no aceptar esta práctica como “cosa de adultos”, y si estuvo en esas prácticas anteriormente, prever que sus hijos/as no repitan el modelo.
(Tomado del libro “La verdad desnuda” de Josh Mcdowell- Ed. Patmos- 2012)
La exposición a la pornografía se expande cada vez más y el espectro de consumición está cambiando a mujeres y a jóvenes. El 70 % de jóvenes entre 18 y 24 consume pornografía una vez al mes. La edad promedio de la primera exposición a la pornografía es 11 años.
Erróneamente muchos jóvenes creen que pueden utilizar la pornografía antes de casarse y abandonarla luego del casamiento porque entonces experimentaran lo real.
Las experiencias sexuales afectan a nuestro cerebro, la pornografía está diseñada para el estimulo sexual, cuando una persona ve imágenes sexuales en internet el cerebro tiene la misma respuesta neuroquímica que tendría si estuviese teniendo contacto sexual con un/a compañera real, su cuerpo libera un gran dosis del químico que lo hace sentir bien DOPAMINA y se llena de oxitócica o vasopresina que funciona para crear un vínculo con esa persona.
Cuando se utiliza pornografía para la estimulación sexual, se crea un vínculo con esa imagen y el cerebro cree que es así. La exposición a la pornografía es altamente sensorial y provoca una liberación del químico de la memoria, la norepinefrina que graba esas imágenes al cerebro; como resultado, las personas no pueden olvidar fácilmente lo que vieron, por la manera en la que el cerebro responde a la pornografía. Ésta puede dañar la habilidad para vincularse con otras personas de una manera sana.
El consumo de pornografía brinda una gran dosis de dopamina por lo que se ha probado que es progresiva y adictiva. Se ha probado también que consumir pornografía distorsiona la mirada de la sexualidad sana. El punto final es que consumir pornografía altera actitudes, percepciones y valores en cuando a la sexualidad.
La Masturbación y sus consecuencias
Esta descripción de Josh Mcdowell, es factible de aplicar también a la adicción a la masturbación que va de la mano con el consumo de la pornografía, o las fantasías sexuales (lujuria) que el varón o mujer que practica la masturbación crea en sus pensamientos.
Además la adicción a la masturbación, que en algunos casos comienza a la edad de 10 años, y continua toda la vida, en la ciudad de Tucumán, un urólogo especialista comentó que estaba impresionado de los casos de chicos adolescente que llegaron a su consultorio con estrangulamiento testicular, causado por la masturbación, donde el epidídimo (donde son activados y expulsados los espermatozoides) estrangula al testículo. Lo que produce atrofia testicular, para lo cual, clínicamente la solución es la extracción del testículo.
Desde EPASI, hemos comprobado en el trabajo de campo con adolescentes y jóvenes, que la pornografía es adictiva, y progresiva. La persona busca satisfacer la adicción a cualquier precio, llevándolos a tener sexo con travestis, con animales, con niños, entrando en un pozo sin fondo. Esto solo puede ser cortado con un tratamiento para adictos sexuales juveniles, que debe ser realizado por especialistas en el tema, con un tratamiento primeramente de reconocer su adicción, cambiar de hábitos, ambientes, amistades, estilo de vida, cambio de valores y un seguimiento de rendición de cuentas semanal, entre otros.
Les sugerimos instalar un filtro anti-pornografía en sus computadoras para así evitar que se ingrese a páginas con contenido pornográfico. A continuación les recomendamos una página donde puede descargarlo:
